Omertá, la ley del silencio

Foto escaneada de la edición impresa de hoy del diario Levante-emv

Eso es lo que está pasando en la Ciudad de la Justicia de Valencia. Tras las denuncias continuadas ejercidas por los periodistas del diario Levante.emv, se procedió a dar la orden de retirada inmediata de los pasquines colocados dentro del recinto. La Guardia Civil encargada de la seguridad  en dicho centro procedió a retirarlos pero los funcionarios procedieron a volver a colocarlos.

Los mismos funcionarios que dias atrás se quejaban a la consellería de no poder llevar a cabo los distintos oficios por falta de papel no tuvieron ningún problema para acceder al uso de folios para fotocopiar estos pasquines y proceder a continuar con su acto delictivo.

Los altos cargos de la judicatura valenciana rechazaron ayer hacer declaraciones públicas sobre la presencia de carteles injuriosos e intimidatorios contra el periodista de Levante-EMV que reveló las irregularidades laborales de algunos funcionarios de la Ciudad de la Justicia que fichan y se van. La fiscal jefe de Valencia, Teresa Gisbert, máxima responsable en las instalaciones de la Ciudad de la Justicia donde hasta ayer a las 8.30 horas había colgado uno de los pasquines, rechazó a través de su portavoz valorar la actitud de los funcionarios responsables de la medida. Tampoco quiso responder a si piensa adoptar alguna medida interna al respecto o si se solidariza con el periodista injuriado. No quiso decir nada.

Así burlan el control de acceso funcionarios de la Ciudad de la Justicia (video)

Resulta lamentable el nivel de descrédito que está teniendo el sistema judicial en Valencia, así como el nivel de descrédito que hacia el colectivo del funcionariado está llevando esta pandilla de sabandijas que si de algún privilegio se merecen es el de ocupar las instalaciones de Picassent junto al resto de chorizos y criminales.

Pero no debe extrañarnos que en un lugar donde los primeros corruptos son nuestros propios políticos, con casos de amiguismo público y notorio como se ha comprobado en el caso de los trajes de Camps, asunto que está siendo retrasado y ocultado por la Justicia, por los medios de televisión controlados por el Consell. También hemos visto el caso de Fabra donde se fueron retrasando los juicios hasta que quedaron obsoletos y fuera de juego.

De verdad que a veces me da vergüenza decir que soy valenciano, menudo asco de políticos, de jueces, de justicia y de ¡¡¡ funcionarios sin ley!!!.

¿A qué esperan para acabar con esta gentuza?.